Después de huir de un grupo guerrillero y ser internada en una institución superpoblada a horas de casa, donde se sintió vigilada las 24 horas del día, los 7 días de la semana, Cecilia fue llevada a un hogar de acogida en Bogotá apoyado por CRAN y Children Change Colombia como parte de nuestro trabajo para ayudar a reintegrar a la sociedad a los niños y niñas luego de ser afectados por el conflicto armado en Colombia. Cecilia dice: “Durante mi primer año [en el proyecto], muchas veces pensé en escapar, y me alegro de no haberlo hecho. Mi sueño es estudiar hotelería y turismo para poder ser empresaria y tener mi propia cadena hotelera”.
Al igual que Cecilia, a muchos niños y niñas se les ha arrebatado su infancia y sus sueños por la violencia que los rodea, y en esta entrada profundizamos en las realidades del reclutamiento forzado de niños, niñas y adolescentes en Colombia, y cómo trabajamos con nuestros socios para brindarles esperanza y nuevas oportunidades.
El conflicto
El conflicto armado en Colombia, que lleva más de cinco décadas, ha dejado profundas cicatrices en la sociedad, especialmente en los niños, niñas y jóvenes. A pesar de la firma del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto el 24 de noviembre de 2016, el reclutamiento forzado de niños, niñas, y jóvenes sigue siendo una realidad preocupante en algunas zonas del país.
El reclutamiento forzado de niños, niñas, y jóvenes en Colombia ha sido una estrategia utilizada por varios grupos armados ilegales, incluidas guerrillas, paramilitares y bandas criminales. Estos niños, niñas y adolescentes, a menudo de comunidades vulnerables, se ven obligados a participar en combates, inteligencia y logística, exponiéndolos a innumerables peligros y traumas, como ser sacados por la fuerza de sus hogares.
Según el Ejército Nacional de Colombia (En una declaración al boletín Cambio 30/07/2024), las formas en que se recluta a niños, niñas y jóvenes para la guerra han evolucionado e incluyen ahora el uso de WhatsApp y Facebook. Además del reclutamiento, que implica que la víctima viva su vida diaria dentro del grupo armado, hay otras maneras de involucrar a los niños, niñas y jóvenes en la guerra sin que vivan con estos grupos armados y sirvan permaneciendo en su lugar de residencia. En estos casos, se utiliza a niños, niñas, y jóvenes para extorsión o para proporcionar información.
Estadísticas impactantes
En Colombia, 25 de 32 departamentos están en alerta por reclutamiento ilícito y uso de menores para la guerra según datos de 2019 de la Defensoría del Pueblo, Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos.
Según lo declarado por la Comisión de la Verdad, entre 1990 y 2017 se reportó el reclutamiento de entre 27.101 y 40.828 niños, niñas y adolescentes. En 2023, se reportó el reclutamiento de 184 niños y niñas en Colombia, según la Defensoría del Pueblo. Sin embargo, el reclutamiento forzado de menores es un delito con un alto índice de subregistro debido a las amenazas que reciben las víctimas, el miedo de las familias a denunciar y, en algunos casos, la adaptación de niños y jóvenes a la vida en grupos armados. Además, la COALICO informe 2018 (Coalición contra la vinculación de niños, niñas y jóvenes al conflicto armado en Colombia) revela que entre 2008 y 2017, 2.907 menores se desvincularon de grupos armados. Se trata de una cifra que refleja tanto el éxito de algunas intervenciones como la persistencia del problema.
Children Change Colombia
En Children Change Colombia estamos comprometidos con la protección de los derechos de la niñez y la juventud. Algunos de los proyectos más importantes relacionados con el reclutamiento forzoso en los que estamos involucrados incluyen:
Reintegración de los jóvenes a la sociedad: un enfoque comunitario hacia la salud mental
El proyecto tiene como objetivo ayudar a los niños y jóvenes víctimas del reclutamiento forzoso por parte de grupos armados a obtener acceso a los recursos y habilidades que necesitan para enfrentar una variedad de situaciones traumáticas y estigmas. Este proyecto es implementado a través de nuestra alianza con CRAN y Tiempo de Juego, en los departamentos colombianos de Cundinamarca y Meta. En el proyecto nosotros proporcionamos apoyo psicosocial a víctimas de reclutamiento forzoso y hogares de acogida, para superar los traumas del reclutamiento. Además, el proyecto ayuda a niños, niñas, y jóvenes a desarrollar las habilidades necesarias para reintegrarse a la sociedad, y educa a las organizaciones comunitarias locales sobre cómo protegerlos del reclutamiento.
El proyecto también promueve la juventud liderazgo, comprensión de los derechos y entornos protectores dentro y fuera de la familia. Nos centramos en la desestigmatización de los niños, niñas y jóvenes víctimas y el restablecimiento de sus derechos. El proyecto impactó positivamente a 602 niños, niñas, y adolescentes víctimas en dos años, 70% de aquellos han mejorado su bienestar y salud mental, y el 75% ha fortalecido sus habilidades de liderazgo positivo.
Prevenir el reclutamiento infantil y la violencia sexual a través del fútbol
En 2023, 402 niños, niñas y adolescentes del Chocó se beneficiaron del fortalecimiento de habilidades socioemocionales a través de este proyecto, realizado en alianza con ACADESAN y el GIZ (agencia alemana de desarrollo). En la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU, se reconoció el deporte como “un medio para promover la educación, la salud, y el desarrollo y la paz”. La ONU reconoce la contribución del deporte a la hora de fomentar la tolerancia y el respeto, lo que conduce al empoderamiento de los jóvenes. Por lo tanto, Fútbol Por la Paz utiliza el deporte, en este caso el fútbol, como una herramienta de comunicación eficaz para promover la paz entre los niños y niñas de la región y construir un sentido más profundo de pertenencia en sus comunidades.
Además de esto, el proyecto también busca proporcionar kits de fútbol y restaurar campos de fútbol para que los jóvenes puedan disfrutar de un ambiente de juego seguro con otros de la comunidad. También estamos formando a los profesores sobre la prevención del reclutamiento infantil y cómo emplear la metodología de ‘Deportes con Principio’ para fomentar confianza, respeto y tolerancia, empatía, justicia, y disciplina.
En conclusión, la cuestión del reclutamiento forzado de niños, niñas y adolescentes en Colombia sigue siendo una grave preocupación, a pesar de los avances logrados desde la firma del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto en 2016. Las alarmantes estadísticas y la evolución de los métodos de reclutamiento subrayan los persistentes peligros que enfrentan los jóvenes vulnerables en zonas afectadas por conflictos.
Sin embargo, los esfuerzos de organizaciones como Children Change Colombia y sus socios ofrecen un rayo de esperanza. A través de enfoques comunitarios, apoyo a la salud mental e iniciativas como el uso del deporte para fortalecer las habilidades socioemocionales, se están logrando avances significativos para proteger y rehabilitar a los jóvenes afectados. Estos programas no sólo ayudan a su reintegración a la sociedad, sino que también trabajan para romper el ciclo de violencia y garantizar un futuro más seguro y esperanzador para la juventud colombiana. El viaje está lejos de terminar, pero la resiliencia y la dedicación de estas iniciativas proporcionan una base sólida para el progreso y el cambio continuos.
CCC también ha firmado recientemente un acuerdo de colaboración con STOP THE TRAFFIK y es parte del Traffik Analysis Hub, una colaboración impactante entre múltiples sectores, unidos por el objetivo común de prevenir la trata de personas. Cifras recientes del centro revelan una estadística preocupante: 1 de cada 3 víctimas entre los 50 millones de esclavizados en todo el mundo son niños y niñas. El reclutamiento infantil y la explotación sexual son formas de trata de personas y trabajaremos con ellas para abordar estos problemas en Colombia.
Escrito por: Andrea Lopez-Alba